Mariposas: El insecto más bello para fotografiar

Cita

"Hermosas y graciosas, variadas y encantadoras, pequeñas pero accesibles, las mariposas nos llevan hacia el lado soleado de la vida. Porque cada uno de nosotros merece un poco de sol".
Jeffrey Glassberg.
Por qué fotografiar mariposas

Hay un primer motivo que es su peculiar belleza. Pero además acercarse a estos animalitos supone descubrir todo un mundo perfectamente diseñado y repitiendo el mismo ciclo evolutivo desde miles de años atrás. La naturaleza es así y descubrirla en detalle a través también de los pequeños seres que la habitan, nos permite comprender mejor la riqueza y la diversidad de nuestro planeta.
Algunos consejos para fotografiarlas

Las mariposas son inquietas y no paran de moverse de flor en flor. No obstante, suelen necesitar, si la temperatura de la mañana es un poco baja, recargar energía antes de volar. Para ello pueden necesitar exponerse al sol con las alas abiertas durante un tiempo que pueden ser segundos hasta unos pocos minutos. Es el momento de cazarlas acercándonos poco a poco. Cuando localizo el objetivo empiezo a disparar a cierta distancia y poco a poco me voy acercando. Aquí siempre es de ayuda un teleobjetivo que nos permita acercar la imagen. Priorizo una velocidad de disparo alta (500 o más) con lo que intento asegurar un buen resultado aunque el animal se mueva un poco. En ocasiones, es mejor quedarse estático al lado de las plantas donde acuden y esperar a que vengan.

Color, belleza, fragilidad

Las mariposas son el nombre común por el que se conocen a los insectos que se incluyen dentro del orden de los lepidópteros (proviene del griego «lepis», escama, y «pteron», ala), que se traduce en “ala de escama”.
Las más conocidas por su gran colordo las mariposas diurnas, pero la mayoría de las especies son nocturnas (polillas, esfinges, pavones, etc.), aunque estas pasan en ocasiones desapercibidas.
Las alas, el cuerpo y las patas, como las de las polillas, están cubiertas de una sustancia parecida al polvo. Escamas que se desprenden al manipular al animal . A diferencia de polillas , las mariposas están activas durante el día y suelen tener colores brillantes o diseños llamativos. Quizás las características físicas más distintivas de la mariposa sean sus antenas con punta de maza y su costumbre de sostener las alas verticalmente sobre la espalda cuando está en reposo.
El ciclo de vida de los lepidópteros tiene cuatro etapas: huevo , larva ( oruga ), pupa (crisálida) y adulto (imago). Las larvas y los adultos de la mayoría de las mariposas se alimentan de plantas, a menudo sólo de partes específicas de tipos concretos de plantas.
Las mariposas son de sangre fría, lo que significa que no pueden regular su propia temperatura corporal. Como resultado, su temperatura corporal cambia con la temperatura del entorno. Si tienen demasiado frío, no pueden volar y deben calentar sus músculos para poder reanudar el vuelo. Las mariposas pueden volar siempre que la temperatura del aire esté entre 16° y 40° C, aunque las mejores temperaturas están situadas entre 27° y 35°C. Si la temperatura baja demasiado, pueden buscar una roca, arena o una hoja de color claro en un lugar soleado y tomar el sol con las alas extendidas para absorberlo.
Otra forma en que las mariposas pueden escapar del clima frío es migrando a una región más cálida. Algunas mariposas migratorias, como la dama pintada y la mariposa de la col, vuelan sólo unos pocos cientos de millas, mientras que otras, como la monarca, viajan miles de kilómetros.

Una mariposa curiosa

Falsa Limbada

La mariposa Falsa Limbada, conocida científicamente como Limenitis reducta, es una pequeña joya alada que habita en los bosques y matorrales del sur de Europa. Sus alas presentan un fondo oscuro, casi negro, decorado con manchas blancas que parecen pinceladas delicadas sobre un lienzo. A lo largo de los bordes de las alas, brillan sutiles reflejos azulados que le dan un toque de iridiscencia, como si un poco de cielo se hubiera posado en ella.
A esta mariposa le encantan los días soleados y calurosos, por eso se la puede ver revoloteando desde junio hasta septiembre en claros de bosque y zonas floridas, volando ágilmente y defendiendo su territorio de otros machos. Las orugas de la Falsa Limbada se alimentan de plantas como la madreselva, mientras que los adultos disfrutan del néctar de las flores y también de la savia de los árboles y frutas maduras.
Una de las curiosidades de esta mariposa es su habilidad para mimetizarse. Aunque lleva el nombre de "falsa", en realidad su parecido con otras mariposas de su género es una estrategia para evitar a los depredadores. Además, las orugas se camuflan como pequeñas ramas o excrementos de aves para pasar desapercibidas. Esta mariposa no solo añade belleza al paisaje con su vuelo, sino que también juega un papel esencial como polinizadora, ayudando a mantener la salud de los ecosistemas que habita.

Soportando el aire

Mariposa Cometa Macaón

La mariposa Cometa Macaón, conocida científicamente como Papilio machaon, es una de las mariposas más espectaculares y fácilmente reconocibles de Europa. Con sus alas de un brillante color amarillo adornadas por manchas negras y azules, y unos característicos "ojos" rojos en la parte inferior, parece una joya viviente surcando el aire. Su envergadura puede alcanzar hasta los 8 centímetros, lo que le otorga una presencia imponente y elegante mientras vuela de flor en flor en busca de néctar.
El Cometa Macaón es un amante de los espacios abiertos y soleados. Suele habitar praderas, campos de cultivo, jardines y hasta bordes de caminos, lugares donde las plantas que alimentan a sus orugas, como las zanahorias silvestres y el hinojo, crecen en abundancia. Es un insecto que no pasa desapercibido, ya que su vuelo rápido y su tendencia a planear en el aire lo convierten en un espectáculo digno de contemplar.
Una de las curiosidades más fascinantes de esta mariposa es su ciclo de vida. Las orugas, con sus colores verdes y bandas negras con puntos anaranjados, son igual de vistosas que los adultos. Cuando se sienten amenazadas, despliegan un par de estructuras naranjas con olor desagradable, llamadas osmeterios, que sirven para ahuyentar a los depredadores.
La Cometa Macaón no solo es un deleite visual, sino también un símbolo de la conexión entre la naturaleza y los jardines humanos, demostrando que con un poco de esfuerzo, podemos atraer y proteger a estas magníficas criaturas en nuestro entorno.

En su entorno natural (Parque Ordesa)

Las mariposas, con su belleza delicada y colorida, suelen ser indicadoras de la salud ambiental de los espacios naturales. Estos fascinantes insectos se encuentran mayoritariamente en lugares donde el equilibrio ecológico se mantiene intacto, ya que dependen de una vegetación silvestre y variada para prosperar. Los parques naturales y reservas protegidas, con su abundancia de flora autóctona, son hábitats ideales para observarlas en plena libertad. Allí, donde las plantas florecen sin intervención humana, las mariposas encuentran alimento, refugio y espacios donde completar su ciclo vital. Así, la presencia de mariposas en un área es un signo claro de que ese entorno goza de buena salud ambiental, invitándonos a disfrutar de la naturaleza en su forma más pura y equilibrada.

Parque Nacional de Ordesa

Retratar la naturaleza

El Parque Nacional de Ordesa ofrece un entorno natural espectacular para la fotografía, no solo de sus impresionantes paisajes de montañas, valles y cascadas, sino también de su rica diversidad de fauna. Este espacio protegido alberga diferentes especies de aves, como el quebrantahuesos y el águila real, que pueden ser capturadas en pleno vuelo o posadas en los riscos. Además, el parque es un refugio para pequeños mamíferos como la marmota y el sarrio, que se pueden fotografiar en sus hábitats naturales. Pero la magia de Ordesa también se encuentra en los detalles más pequeños. Las praderas y bosques del parque son el hogar de una amplia variedad de mariposas y otros insectos, que añaden color y vida al entorno. Fotografiar estos pequeños seres en sus momentos de actividad, posándose sobre flores silvestres o moviéndose entre los arbustos, ofrece una oportunidad única para capturar la belleza y diversidad de la naturaleza a escala íntima. Así, Ordesa se convierte en un paraíso para los fotógrafos de naturaleza, donde cada rincón es una ventana a la vida silvestre y a la biodiversidad.

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